LA HABANA, CUBA, 3 de mayo de 2023 – Después de pasar 10 días en Cuba, la histórica delegación de más de 150 jóvenes líderes de todo Estados Unidos llega a su fin. Los y las participantes regresan a los EE.UU. con un compromiso aún mayor para seguir fortaleciendo sus luchas en su país y luchar por el fin del bloqueo a Cuba.

La delegación, organizada por la Asamblea Internacional de los Pueblos (AIP), incluía sindicalistas, trabajadores culturales, activistas contra la brutalidad policial, organizadores de inquilinos y científicos de diversas organizaciones de Estados Unidos.

Durante su estancia en Cuba, los delegados se reunieron e intercambiaron opiniones con representantes de la comunidad LGBTQI+, organizaciones afrocubanas, estudiantes y profesores de la escuela de medicina internacionalista ELAM, grupos de educación popular, científicos, deportistas, artistas y muchos otros.

En estos intercambios, los miembros de la brigada conocieron las experiencias del pueblo cubano en la construcción de organizaciones y legislaciones que garanticen el cumplimiento de los derechos económicos y sociales de las personas, tales como salud, educación, vivienda, actividad física, empleo, entre otros.

Muchos ponentes también subrayaron que el bloqueo que lleva más de seis décadas, fue intensificado por el expresidente Donald Trump quien colocó 243 medidas coercitivas unilaterales adicionales contra Cuba e incluyó al país en la lista de estados patrocinadores del terrorismo. Todas estas decisiones han sido mantenidas por el presidente Joe Biden.

La crisis de escasez de combustible que enfrenta hoy el pueblo de Cuba, es una clara manifestación de los desafíos que enfrenta el país incluso en el nivel más básico del comercio internacional debido al bloqueo estadounidense.

Kawenaʻulaokalā Kapahua del Academic Labor United y participante en la delegación de Hawai’i dijo: «Nos vamos con una mayor comprensión de la agresión contra Cuba, pero más que eso, con lecciones concretas sobre cómo construir la unidad en la diversidad, cómo derrotar a un enemigo que parece invencible, y cómo, sobre todo, centrar el amor y la esperanza en todo lo que hacemos.»

«Tenemos enormes tareas por delante. Nuestra generación tiene el deber histórico de derrotar, de una vez por todas, el bloqueo asesino; de organizarnos y luchar en nuestras comunidades, en las calles, en el Congreso y en las redes sociales para construir el movimiento más amplio posible de solidaridad con Cuba y contra la agresión estadounidense.»